Inspirada en la camiseta de visitante que lució el equipo de 1958 a 1961, el tono blanco que cubre el conjunto (escudo incluido) casa a la perfección con la raya central con los colores azul y amarillo que ha incluido históricamente el escudo de los toffees. Vuelve el cuello redondo y la importancia de los detalles con colores mucho más vibrantes: al blanco se le unen el azul eléctrico y el naranja fosforito.