Él entregó el dinero para comprar la tela para hacer las camisetas y los shorts, cuando se compró la tela se les entregó a cada muchacho para que ellos mismos confeccionen sus uniformes cuyos colores ya se habían seleccionado. Muchos fabricantes de botas tienen contratos comerciales firmados con distintos futbolistas profesionales, quienes a cambio de una prestación monetaria y un diseño personalizado exhiben exclusivamente las botas de la marca en cuestión.